Si estás pensando en vender tu vivienda, como contribuyente de la Administración, deberías empezar a hacer cuentas para saber si te conviene cerrar la operación este año o el siguiente. Te informo que dicha reforma fiscal suprime, para el ejercicio 2015, los coeficientes de actualización que corrigen la plusvalía obtenida por el efecto de la inflación y ello nos hará pagar algo más.
Os pongo un ejemplo, el beneficio por la venta de una vivienda comprada en 2001 por 230 mil euros y vendida por 300 mil euros supondrá una factura fiscal en torno a 15.600 euros en 2015 frente a un coste de 3.950 euros en 2014. Una diferencia de 11.650 euros.
Consejo: planifica el pago de tus impuestos.